La mayoría de nosotros esperamos con impaciencia el viernes durante la semana laboral y, cuando llega, estamos tan ansiosos por entrar en la onda del fin de semana que a menudo no nos damos cuenta de que la semana laboral aún no ha terminado.
Aunque es natural sentirse menos productivo y con más ganas de desconectar un viernes, se pueden utilizar algunos consejos y trucos para hacer del viernes un día productivo.
En esta entrada del blog, veremos algunas de las formas más eficaces de tener unos viernes productivos sin agobiarte ni matar el ambiente del fin de semana. Así que allá vamos.
Tenga preparada una lista de tareas
Una de las peores maneras de afrontar un viernes, o cualquier otro día, es no saber qué vas a hacer a lo largo de la jornada.
Así que si quiere tener un día productivo, asegúrese de preparar una lista de tareas el jueves por la noche para no quedarse sin saber qué hacer al comienzo del viernes.
Para ello, puedes utilizar una aplicación de listas de tareas como Routine.
Si utiliza la Rutina, todas las tareas que haya anotado para el viernes aparecerán el jueves en la pantalla"Hoy" para que pueda centrarse en lo que tiene entre manos sin distraerse.
Trabajar en tareas de baja cognición
Si por lo general tiene poca energía cognitiva de sobra los viernes, añadir trabajo de alta cognición a su lista de tareas de los viernes no le ayudará.
Así que elige tareas que puedas realizar cómodamente sin agotarte y sin cometer errores en el proceso.
Piensa en ellas como en las típicas tareas de después de comer, que puedes llevar a cabo incluso si no estás en tu estado más atento.
Empiece pronto el día
Si quieres salir pronto de la oficina un viernes, no eres el único. Para muchos de los que trabajan de 9 a 5, el último día de la semana laboral termina a las 15.00; después, sólo queda esperar hasta las 17.00.
Pero siguen siendo dos buenas horas perdidas en las que podrías haber sido productivo. Así que una forma razonable de compensarlo sería empezar el día un poco antes.
¿Con cuánta antelación? Eso dependerá de sus preferencias y de la política de su organización, pero una hora antes debería darle esa ventaja tan necesaria para terminar pronto la jornada.
Póngase al día en las reuniones de comunicación y revisión
Si tienes un montón de correos electrónicos no críticos que hay que responder, reuniones de revisión, etc., el viernes es el día para hacerlo y así poder liberar tiempo la semana que viene para trabajar en tareas más críticas.
Una buena forma de hacerlo sería bloquear el tiempo de los viernes para eventos específicos, como reuniones, y ver si puede conseguir que su equipo acepte este horario.
Puedes bloquear el tiempo en una aplicación como Routine, que es súper sencilla. Solo tienes que arrastrar y soltar el elemento en tu calendario y listo. Puedes leer más sobre el bloqueo del tiempo aquí.
Prepárese para la semana que comienza
El viernes es ideal para repasar la semana pasada y preparar la siguiente. Así que reserva tiempo para ello, preferiblemente después de comer, donde podrás crear un volcado de todas las tareas en tu cola y luego empezar a priorizarlas.
Para las tareas no negociables, puede bloquear tiempo para ellas en su calendario. Para otras tareas más pequeñas, puedes agruparlas en lotes y luego bloquear tiempo para el lote en lugar de para las tareas individuales.
En cuanto a la revisión, podrás ver todas tus tareas/elementos de la semana que pasó en el Diario de Rutinas.
Reflexiones finales
Aunque el enfoque de la productividad varía de una persona a otra, probar estos consejos te ayudará a identificar lo que funciona para ti un viernes, y puedes llevarlo más allá y personalizarlo a tu medida.
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