Productividad para un lugar de trabajo híbrido
Si se siente más productivo trabajando desde casa, es posible que le preocupe su vuelta a la oficina tras la pandemia. Los estudios sugieren que el 72% de los trabajadores británicos desean un sistema híbrido, así que no estás solo.
Es fácil entender por qué tanta gente se siente aprensiva. Después de meses gestionando tu propio horario, volver a una oficina llena de distracciones es desalentador. Los estudios sugieren que se puede tardar hasta 23 minutos en volver a la rutina después de una interrupción. Perdemos un tiempo valioso con cada petición de última hora, reunión improvisada o pregunta de un compañero. Y no sólo eso, sino que el zumbido continuo de la conversación nos deja anhelando la paz. No es de extrañar que las personas trabajen mejor cuando controlan su entorno.
Por supuesto, los directivos están deseando que los trabajadores vuelvan a las oficinas, donde, sin duda, la conexión y la colaboración son mucho más fáciles. Sin embargo, la mayoría de ellos reconoce que repartir el trabajo entre la oficina y el hogar es la nueva normalidad. La buena noticia es que casi la mitad de las empresas británicas están planificando una futura plantilla híbrida; así que, aunque la vuelta a la oficina es inevitable para la mayoría, será más flexible que nunca.
Siga leyendo para conocer nuestros consejos para navegar por la productividad híbrida sin poner en peligro su salud mental.
#1: Prepara tu espacio de trabajo
En marzo de 2020, miles de trabajadores se apresuraron a instalar improvisadas oficinas en casa cuando las oficinas pasaron repentinamente a ser remotas. Puede que la mesa de la cocina te sirviera de escritorio provisional al principio, pero el dolor de espalda o de cuello afectará a tu rendimiento y será perjudicial para tu salud mental a largo plazo. Para trabajar bien desde casa, hay que tener la configuración adecuada. Empieza por preguntar a tu jefe qué disposiciones puede adoptar para tu oficina en casa.
Consejos para organizar la oficina en casa:
Asignar un espacio de oficina
Elija un lugar luminoso y bien iluminado, a ser posible cerca de una ventana.
Utilice muebles ergonómicos de buena calidad
Asegúrese de que dispone de espacio de almacenamiento suficiente para sus necesidades
Decora tu habitación con plantas
Además de la distribución física de tu oficina en casa, puedes reducir el cambio mental organizando tu espacio doméstico de forma que se parezca a tu escritorio en la oficina.
#2: Organizar qué tareas son adecuadas para cada entorno
Las oficinas compartidas son perfectas para presentaciones, conversaciones y colaboración. El trabajo en equipo es vital para crear una cultura de empresa, así que mantén una visión general de los horarios de todos y planifica tiempo en la oficina para la lluvia de ideas colectiva y la planificación en grupo. No olvides el aspecto social: no olvides charlar con un colega durante el almuerzo u organizar una actividad para que todos se reúnan después del trabajo.
En cambio, trabajar desde casa es mejor para hacer las cosas. Puedes concentrarte en hacer llamadas, responder a correos electrónicos, redactar informes, analizar datos y otras tareas concretas reduciendo las distracciones. Si no es tu caso, debes aprender a organizar tus tareas y tu tiempo creando un sistema de productividad personal que funcione para ti y tus circunstancias. Desde la pandemia, muchas organizaciones han impartido formación sobre gestión del tiempo para ayudar a los empleados a tener jornadas de trabajo a distancia más productivas y equilibradas.
¿Qué entorno es mejor para las reuniones?
Por supuesto, las reuniones tendrán lugar en ambos lugares, pero considere qué entorno funciona mejor para cada tipo de reunión. Escuchar a un orador invitado, la planificación en equipo o las reuniones que requieren interacción se adaptan mejor a la oficina de la empresa, donde puedes hacer preguntas después de la reunión. Las reuniones en la oficina son mejores si tiene preguntas o preocupaciones específicas sobre una tarea o proyecto concreto.
Sin embargo, el intercambio de información y las reuniones de los departamentos funcionan bien virtualmente. Ten cuidado al planificar o asistir a reuniones virtuales, ya que la "fatiga Zoom" aumenta la carga cognitiva.
Cuando decida si asistir a una reunión virtual o presencial, elija el entorno que mejor se adapte a sus necesidades.
Y es importante plantearse responder a algunas preguntas a la hora de elegir un entorno, como por ejemplo cómo mejorar la productividad de los desarrolladores en la organización si esa es la principal preocupación, cómo funcionará la logística, etc.
#3: Programar una comunicación regular
La comunicación se ralentiza cuando los equipos trabajan desde distintos lugares, más aún si los miembros se encuentran en zonas horarias diferentes. Margaret M. Luciano, profesora asociada del Smeal College of Business de la Universidad Estatal de Pensilvania, cree que es fundamental ser proactivo. Según ella, para que los equipos híbridos funcionen bien, los empleados deben "asumir parte de la responsabilidad que conllevan, como la resolución autónoma de problemas y la provisión y comprobación de actualizaciones".
Es esencial facilitar el uso eficaz de plataformas compartidas y videollamadas periódicas para controlar a tus compañeros. Asegúrate de comunicar a tu jefe en qué estás trabajando, cómo te va y, lo que es más importante, comunícale cualquier problema o incidencia a medida que surja. Aprender nuevas prácticas de comunicación que los jefes deben implantar entre los empleados es fundamental, y muchos pueden necesitar formación en habilidades de comunicación para establecer nuevos hábitos cuando trabajan desde casa.
#4. Establecer límites
Trabajar desde casa tiene muchas ventajas, como una mayor flexibilidad. Sin embargo, los empleados trabajan más horas cuando la frontera entre el trabajo y la vida familiar se difumina. Por ejemplo, alguien que empieza temprano puede tener dificultades para apagar el ordenador al final del día, o los que prefieren trabajar más tarde por la noche pueden no relajarse antes de empezar a trabajar. Para evitar el agotamiento, los empleados deben organizar su tiempo y tener en cuenta conscientemente su bienestar mental.
Pasos sencillos para desconectar cuando se trabaja desde casa:
Crea un hábito, como un breve paseo al aire libre, para señalar el comienzo y el final del día.
Evite trabajar en zonas de descanso, como el salón o el dormitorio.
Apagar el ordenador y las luces al finalizar la jornada laboral
Silenciar las notificaciones del ordenador y el teléfono
#5. Mantener las conexiones sociales
La desconexión de los trabajadores es otro motivo de preocupación cuando trabajan desde casa. Sin conversaciones informales antes de las reuniones o en torno a la máquina de café, los trabajadores pueden sentirse cada vez más aislados. Es esencial establecer y mantener relaciones laborales positivas en un entorno híbrido.
Enfoque la socialización con intención; por ejemplo, un check-in de cinco minutos al principio o al final del día une a los equipos. Las actividades de creación de equipos, como los almuerzos compartidos o las copas después del trabajo, unen a las personas cuando todo el mundo está en la oficina. Formar relaciones de confianza proporciona una red de apoyo en la que puedes confiar cuando trabajas desde casa.
En conclusión, dividir el trabajo entre dos (o más) oficinas no tiene por qué ser estresante; hay que hacer un trabajo previo de planificación para aprovechar mejor el tiempo en el lugar de trabajo híbrido.
Este es un artículo escrito por invitados de Findcourses.co.uk.