Problema
Emprender es difícil por los rasgos esquizofrénicos que te obliga a adoptar.
Te levantas por la mañana inflado con la promesa de todos los avances que vas a conseguir hoy, intentando convencer a tus empleados, inversores y clientes de que tu producto o servicio es el mejor de su clase. Y te vas a la cama pensando que no tienes ni idea de lo que estás haciendo. Si te sientes así, no te preocupes, es algo común 🙂 .
Es muy fácil caer en el caos de la vida cotidiana del empresario y olvidarse de dar un paso atrás.
Tómese el tiempo necesario para reflexionar sobre su viaje en conjunto y darse cuenta de que las cosas no son tan malas como parecen. Lo mismo ocurre en términos más prácticos. ¿Adónde va tu tiempo? ¿Estoy empleando mi tiempo en lo que importa o lo estoy malgastando en cosas que me hacen sentir bien en lugar de mover la aguja?
Escenario
Una mañana, un miembro del equipo de marketing le invita a una reunión.
Hay una descripción del evento, pero es bastante sucinta. Sin mucha más información, ¿cómo debe abordar este tipo de invitaciones?